Un inspirador llamado Rafael

Por ADLB

La vida de Rafael Jijena Sánchez es un continuo renacer. Imposible encuadrarlo en una sola ocupación porque es un multicreativo. Ahora, su largo recorrido lo llevó a querer contagiar su entusiasmo a los demás y lo hace a través de charlas motivacionales.

Preparando su charla

¿Cómo son tus charlas y qué ejes tienen?

Mis charlas motivacionales están basadas en la vida y pensamiento de grandes figuras de la humanidad. Lo que intento es motivar a la gente para que actúe, tanto en lo personal como en lo profesional, “en modo” Madre Teresa, Mandela o Frida Kahlo. No es fácil, es un objetivo ambicioso, pero vale la pena intentarlo… Mis ejes temáticos son el descubrimiento de los sueños, la motivación para alcanzarlos, la planificación y la ejecución. Las metas, por más difíciles que parezcan, son posibles y siempre estamos a tiempo para hacer un cambio de vida. En la India hay maestros que te ayudan a despertar sueños dormidos…

¿Pudiste concretar todos tus sueños?

Pude concretar muchos. De hecho, en 2014, tuve la suerte de poder concretar uno en torno a algunas vidas inspiradoras como las que te mencionaba al comienzo: un musical que se llamó Pasos de Amor, que contaba la historia de cuatro jóvenes que terminarían siendo Teresa de Calcuta, Martin Luther King, Juan Pablo II y Gandhi. Nunca había escrito un musical pero me animé y fue una experiencia extraordinaria.

Creás proyectos y te entusiasma ayudar a la gente a crearlos. ¿Cómo logras que vislumbren la idea y se pongan en marcha?

Me gusta ver al entusiasmo como si fuera una luz potente, contagiosa, una luz que ilumina el camino a seguir, para que nosotros podamos verlo claramente y para que también lo vean todos los que se sumarán a la idea. Es ahí cuando aparece el sincronismo: se visualizan puertas que se abren, caminos que se facilitan, fuerzas interiores que ni imaginábamos que teníamos y donde todo el universo conspira a favor. Hay que disipar dudas, temores, el miedo al cambio, al fracaso… iniciar un nuevo proyecto a cierta altura de la vida puede ser un poco intimidante… siempre da vueltas el temor a fallar. Hay que aprender a mantenerlo lejos.

¿Cómo acompañás el proceso? 

Voy guiando de a poco, paso a paso. Usando una terminología de moda, te diría que los voy coacheando en el camino… Luther King decía que a veces asusta ver la escalera a los sueños en forma completa… por eso mejor es concentrarse en los primeros escalones.

Por los aires en Toledo

¿Cómo motivas a la gente?

Primero la ayudo a descubrir sus capacidades, fortalezas y debilidades. Segundo, le recuerdo que hay dos días cruciales en nuestras vidas. El día en que nacimos y el día en que entendemos “para qué”. Si tenemos claro el “para qué”, nos será mucho más fácil encarar el “cómo”. Los proyectos pueden ser propios o de terceros, ayudar a concretar el sueño de otro también despierta el entusiasmo. Y también hay herederos sociales… ahí surgen proyectos comunitarios, solidarios. La edad jamás podrá ser un problema. Cuando me preguntan la edad que tengo, suelo responder… ¡todas! Es que es así, la vida es una sumatoria de experiencias, de momentos… de cada etapa hay que rescatar la que mejor se adecue.

El entusiasmo se transmite, se contagia, se estimula, se entrena…. ¿cómo?

Entusiasmar es endiosar una idea, una pasión… Una manera es imaginar a esa idea como si fuera la amada ideal. Hay que descubrir ese sueño. Y tiene que ser fuerte, poderoso, un imán… no puede ser algo pasajero, sino no sería una idea lo suficientemente atractiva como para enamorarnos. Uno por amor hace muchas cosas. Y tenemos que contagiar ese embeleso a quienes nos acompañen en el proyecto. “Para alcanzar el éxito no es necesario hacer cosas extraordinarias sino hacer cosas ordinarias, extraordinariamente bien hechas”, decía Gandhi.

En su salsa: charlas que motivan

¿Qué es lo que más necesitan los que tienen más de 60?

Desterrar estereotipos, falsas creencias, como, por ejemplo, suponer que en el plano laboral uno es game over. Todo lo contrario. Es una época ideal para capitalizar lo aprendido, lo que se hizo bien… Y también, lo que no se hizo tan bien o lo que no se terminó de realizar. Cuando se entiende eso, los cambios son notables…

Transitaste un gran camino creativo, con una hoja de ruta llena de emprendimientos de diversa índole y seguís emprendiendo… ¿qué aprendiste de tus errores?

Tenemos que estar dispuestos a aceptar los errores, para corregirlos, no para desanimarnos. Tenemos que perdonarnos, no castigarnos. Si no estás cometiendo un error es que no estás innovando. Hay que verlos como oportunidades y no como fracasos.

¿Qué cosas no debería olvidar nunca un emprendedor?

1. Pensar que no hay competencia directa o indirecta. 2. Creer que iniciar un emprendimiento es una actividad part time. 3. Pecar de exceso de optimismo.

¿Hay una edad ideal para emprender?

No hay edad ni momento, si nos ponemos a esperar el momento ideal nunca lo encontraremos, el momento es ahora…

¿Tenés alguna frase de cabecera o mantra?

Una a la que trato de no fallarle nunca: “no postergar lo sueños”.

Un sueño hecho realidad: el estreno en el Teatro El Nacional de Pasos de Amor, el Musical de la Paz

Rafael Jijena Sánchez, además de ser coach motivacional, ayuda a escribir biografías… según él mismo define: una tarea muy sanadora. Es creativo publicitario, con paso por varias agencias y una propia, conferencista y editor. Fue Director Artístico de América ’92, evento que permitió integrar Puerto Madero a la ciudad, y creador de Pasos de Amor, el Musical de la Paz.

Más info: Rafaeljijenasanchez.com.ar